El Nascar realizó una carrera sin puntos para el campeonato, denominado “Clash” y fue en un óvalo que se construyo dentro del Coliseo de Los Angeles. Un estadio de futbol americano en el cual se realizan diferentes eventos.
Y para esta competencia histórica se llevo a cabo un formato de carrera en el cual se desarrollaron clasificaciones, series y la gran final a 150 vueltas a este trazado de 400 metros donde participaron 25 pilotos.
Tras completar los 150 giros, Joey Logano con el Ford Mustang se quedo con la victoria, segundo fue Kyle Busch con el Toyota Camry y tercero termino Austin Dillon con el Chevrolet Camaro.